martes, 8 de octubre de 2013

Te busco.

  Y es que te sigo buscando en mis sábanas, se que no te encontraré, pero sigo buscando tu aroma, sigo buscando tus caricias y te sigo buscando para que cuentes mis lunares, para que me llenes de besos, para que me muerdas el cuello y me digas tonterías.
 
  Te busco aunque no te encontraré. Te busco porque te extraño, te busco porque te quiero.

  Si, es eso. Efectivamente es eso, es que te quiero. No se porque. Miento, claro que lo se, ¿Cómo no voy a saberlo?, es totalmente obvio. Es tu piel, es tu aroma, es tu cabello, es tu espalda, son tus lunares, son tus labios, son tus besos. Eres tú. Con todo y lo tonto que eres al final tenias razón, yo soy más tonta puesto que me gusta un tonto.

  Tonto y todo te sigo buscando... y te encuentro, la verdad es que si te encuentro. Te encuentro en mis manos.

  Mis manos que tienen tu aroma, que tienen entre los dedos la sensación de tu cabello. Mis manos, que han tocado cada milímetro de  tu piel, y han tocado cada uno de esos preciosos lunares.

  Y es que para serte honesta, te extraño.

  Con todo y lo tonto que eres, te extraño.


No hay comentarios:

Publicar un comentario